"Paladium 86" es una mezcla de los conciertos acontecidos el 18 y 25 de octubre de 1986 en Paladium (Reconquista al 945) a las 21:00 horas, para la presentación del nuevo álbum de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota, Oktubre. El álbum tienen canciones de los dos álbumes del grupo hasta ese momento, además incluye varias canciones inéditas como por ejemplo, "El regreso de Mao", "Roxana Porchelana", "Rock de las Abejas", "Patricio Super Show" y "Nene Nena". También cuenta con "Blues de la Libertad", que fue editado recién en 1996 en Luzbelito.
En 1986, aprovechando el portaestudio del Gonzo, el grupo compone nuevos temas y bucea en un nuevo sonido. El resultado es gran parte del material que tomará parte del segundo disco: "Fuegos de octubre", "Semen-Up", "Musica para pastillas", "Preso en mi ciudad", "Motor psico" y "Divina TV Führer". En mayo tocan en Palladium, en shows que arrancan con la grandilocuente Obertura 1812 de Tchaicovsky. Por entonces, a la hora de encarar la grabación definitiva, el método de los ahorros permite que vayan a un estudio como Panda y ahí registran Oktubre, en los meses de agosto y septiembre. Los invitados de turno son Daniel Melero (por entonces en Los Encargados), en teclas, y Claudio Cornelio (del grupo revelación del momento, Don Cornelio y La Zona) en percución electrónica. La tapa, claro, una vez más va a dar a las manos de Rocambole. Para los siguientes shows, un ciclo en el centro Parakultural de la calle Venezuela y otro en Palladium, se suman Claudio Cornelio y el tecladista Andrés Teochadiris con su órgano Hammond. Durante el verano siguiente, en el momento en que el grupo decide incorporarlo como miembro estable, Andrés muere en un accidente. Skay y el indio deciden no reemplazarlo.
"Los Redonditos estuvieron recluidos en un estudio durante un par de meses y algo se apagó en el oscuro ambiente underground porteño. Los Redonditos volvieron para presentar su segunda obra, “Oktubre”, en un duro octubre para los que se aventuraron en organizar algún concierto, y Paladium se llenó hasta reventar.
Escenografía de revolución, brazaletes rojos, banderas y panel de manifestación más una opertura gloriosa, el monumental tema “Oktubre“ fueron la contundente imagen y sonido del reencuentro. Y la banda sonando mejor que nunca, potente pero fresca. El grupo ya tiene diez años, pero se ha superado y ha transformado su concepto para sonar, conmover más allá del mito. Lo que no suena bien —como una bateria directamente fuera de tiempo durante varios pasajes— al menos es simpático.
Una exposición de todo el nuevo material puede parecer riesgoso como para presentarlo ante un millar de fans —fans absolutos, de los que corean todos los temas— enardecidos. Pero los Redondos lo hicieron, y tan bien como para que la gente se diera cuenta que las canciones más recientes son también excelentes: ”Semen Up” —una especie de tango psicodélico—, “Ya nadie va a escuchar tu remera” —con una interesante teoria sobre los slogans estampados sobre la ropa— y “Divina TV Fürer”, junto con la primera, fueron de hecho lo mejor del concierto en Paladium. Otros pensarán que la verdad de los Redondos es el rockanroll más clásico. Pruebas no faltan: el final, con esa serie de siete —u ocho o nueve— rockanrolles seguidos fue sencillamente apoteótico."
Revista Pelo - Reseña de los conciertos (1986)
02- El regreso de Mao
03- Cancion para naufragios
04- Roxana Porchelana
05- Divina tv fuhrer
06- La bestia pop
07- Jijiji
08- Blues de la libertad
09- Rock para las abejas
10- Semen-Up
11- Preso en mi ciudad
12- Musica para pastillas
13- Patricio Super Show
14- Ya nadie va a escuchar tu remera
15- Nadie es perfecto
16- Unos pocos peligros sensatos
17- Nene nena
Skay Beilinson: Guitarra
Tito "Fargo" D'Aviero: Guitarra
Semilla Bucciarelli: Bajo
Piojo Ávalos: Batería
Willy Crook: Saxofón
Andres Teocharidis: Teclados
Claudio Cornelio: Percusión