En 1969, Los Gatos, el gran grupo pionero del rock argentino, se separaba, poniendo a su tecladista, Ciro Fogliatta, rumbo a Nueva York, donde residiría una temporada. Fue en su ausencia cuando su discográfica lanzó un LP instrumental grabado por él un año antes, en 1968, decidiendo esta incluso el título que llevaría el álbum, Música para el amor joven. Dado que Ciro no se encontraba en Buenos Aires, el disco apareció sin créditos de ningún tipo, situación que ha continuado en la reciente reedición en CD. Así que el propio Ciro Fogliatta nos aclara quiénes le acompañaron en aquella aventura: Alfredo Toth (bajo), Óscar Moro (batería), “Kay” Galifi (guitarra) mientras el propio Ciro se hacía cargo del órgano Hammond y el piano. Es decir, excepto Litto Nebbia, Los Gatos al completo. A esta banda base se sumaron en calidad de invitados Alejandro Medina (bajo), Claudio Gabis (guitarra), ambos componentes de Manal, y Daniel Irigoyen (voz en “Tequila”). Fogliatta desarrolló los arreglos, resueltos en el propio estudio (los TNT, de la calle Moreno de Buenos Aires), en los pocos días que duró la grabación. Luego mezclada en los estudios RCA del barrio de Saavedra, donde a Ciro le acompañó su padre, quien pisaba por vez primera un estudio de grabación.
Con este supergrupo, el teclista se atrevería a desarrollar versiones instrumentales de canciones “que me gustaban, dentro de mi estilo de swing, blues y jazz –razona Ciro, 40 años después–. Muchos no eran temas del momento. Quería darme el lujo de grabar canciones muy viejas y otras nuevas dentro del jazz, funky, blues y rock, una mezcla que, por supuesto, da por resultado el rhythm & blues. Hay algunas canciones que están en discos de grandes organistas norteamericanos de la época, como Jimmy Smith y Brother Jack Mcduff”.
Justamente, el órgano se sitúa en primer plano, tomando el protagonismo: “El estilo era: el órgano tocando la melodía principal de la canción –usando cabina Hammond de amplificador, no un Leslie–, y acompañamiento con solos de órgano y guitarra”. De este modo, se resuelven tomas impactantes en las que el Hammond traza las melodías, en versiones de “Sentado en el muelle de la bahía” (“The sitting on the dock of the bay”), “Enfermería San James” (“Saint James infirmary”), “Qué dije” (“What did I say”) o en esa sorprendente y hechizante “Soplando en el viento”, lectura del “Blowin’ in the wind” dylaniano: “Tiene una base muy sencilla, mas la melodía de órgano. Quizás es el tema más comercial”.
Ciro Fogliatta en Greenwich Village (1969)
Musicos:
Ciro Fogliatta: Organo Hammond, piano
Alfredo Toth: Bajo
Oscar Moro: Bateria
"Kay" Galifi: Guitarra
Musicos Invitados:
Alejandro Medina: Bajo
Claudio Gabis: Guitarra
Daniel Irigoyen: Voz en "Tequila"
Temas:
01- Soplando En El Viento (Blowin' In The Wind)
02- La Darsena De La Bahia (The Sitting On The Dock Of The Bay)
03- Respeto (Respect)
04- Y Yo La Amo (And I Love Her)
05- Que Dije? (What Did I Say?)
06- Enfermeria San James (Saint James Infirmary)
07- Sobre Broadway (On Broadway)
08- Mercy, Mercy, Mercy
09- Tequila
10- Esta Tierra Amarga (This Bitter Earth)
11- Michy, Colita Y El Enano
12- Lamentando (Moanin')
Opa Paco! Como dice que le va? Pasé por su casa vi luz prendida y entré. Siempre sorprendiéndome con sus estrenos, porque para mi este disco del Ciro es una novedad. En otro comentario ya te había comentado lo importante que son Los Gatos en mi memoria musical y los arreglos de Fogliatta me apasionan. El disco está prolijo y me hace acordar a la época que pasaban en los intervalos del cine de mi pueblo unos discos de Lafayette (el organista brasilero)del cual era fanático el dueño del cine.
ResponderEliminarLa grabación está Stereo cosa que a veces no entendés cuando ves que otros discos muy posteriores salieron mono (como El León por ejem). Este disco de Ciro me hizo acordar al uruguayo Sexteto Electrónico Moderno (lo escuchaste?) cuyo estilo instrumental también se fundaba en el mítico órgano Hammond El SEM como le decíamos al Sexteto tenía muy buenos músicos y nunca fue debidamente justipreciado por mi generación, lo considerábamos clase b y con música sólo para apretar (las veces que salí del baile y me perdí de escucharlos!, qué nabo fui). Bueno, agradecido por la nostalgia Paco y te comento que sigo sin Internet ágil como para escuchar decentemente tu radio (no me carga porque a esa hora se satura de navegantes la red local) Cambiaron los equipos Siemens viejos (posta posta)por unos "Chinensens" (Garra garra)Típicos negociados de estos años pos modernos Bueno . Un abrazo grande ..y nunca apagues la luz (por las dudas que pase)
Como le va mi estimado!! Hoy en dia a este disco se lo calificaria de "chill out". Aqui Ciro se dio el gusto de recrear algunos clasicos de su agrado, ajustandose a la melodia, dando con esto cierto gustito comercial a la cosa. Este ripeo es de una milagrosa reedicion en cd de hace unos años, por lo que posiblemente el vinilo original fuera mono (no lo puedo asegurar). El sonido como habras apreciado, pese a la precariedad tecnica de aquellos años, es impecable. Increible lo que lograban con tan poco!!! Abrazo y brindis!!!
EliminarPD: Literalmente, no se si apagar la luz, pero este
gobierno me ha "enseñado" a cuidarla mucho mucho,
mes a mes...
PD2: Conozco el Sexteto. Y que devuelvan los Siemens!!!
Confirmado, edicion original: RCA(VIK) Mono
EliminarEra lógico que así fuera. Mucha gente cree que era normal poseer tocadiscos Stereo, pero no fue así hasta entrados los 70s. La serie VIK de Rca y Pop´s de Odeón salieron todas en Mono. Las empresas discográficas no modernizaron sus cortadoras de acetato hasta que el mercado no lo demandó. Salían en Stereo solo las ediciones extranjeras, cuando así llegaban con sus Stampers de la casa matriz de orígen. Te cuento una anécdota que me hizo un viejo compañero del Palacio de la Música donde yo laburé. Resulta que a fines de los 60s dicha empresa resolvió fabricar equipos Stereo (gloriosa época en que había Industria Nacional!)y para su lanzamiento al mercado se implementó una campaña publicitaria previa. Cuenta mi amigo que prepararon una sala grande y coqueta con equipos para demostración al público (que en su mayoría nunca había escuchado estereofonía)Resulta que se creó tanta expectativa que el primer día de muestra ya estaba lleno de gente antes de abrir y uno de los empleados (que sabía de amplificación) exclamó : "cagamos!" ,los demás no lo entendieron hasta que al llenarse la sala comprobaron que los 5 WAtts x canal de ese tocadisco familiar apenas se escuchaba con 70 y pico de personas alrededor. Mi compañero desde la puerta hacía señas como un desaforado que subieran el volumen y los otros casi arrancaban los potenciómetros de tanto forzarlos. Fue tragicómico, menos mal que un iluminado recurrió a bajar la llave de la corriente e inventar un desperfecto para salvarlos del bochorno comercial. En definitiva luego tuvieron que implementar la demostración en otra sala pequeñita donde entraban grupos de 5 o 6 personas para disfrutar de esa "maravilla de la tecnología": el Daneman De Luxe ("No se olvide de reclamar sus 5 Long Plays, a elección, de obsequio")
EliminarJajaja, muy bueno!!! "Las facultades y la ELECTRICIDAD, en muy pocas personas las puedo encontrar" cantaba Pappo en uno de sus clasicos. En nuestros tres comentarios anteriores, de diversas formas, hablamos (y hablaremos) sobre ella. Salute!!!
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