Primer álbum solista del gran violinista del rock argentino, grabado en 1973. Acompañado por sus compañeros de La Pesada, el disco es un delicioso desborde de blues-rock experimental y delirios psicodélicos varios.
La carrera musical de Jorge Pinchevsky se inicia cuando tenía sólo cinco años, que por iniciativa de su padre había comenzado a estudiar violín. La suya fue una formación clásica: Conservatorio, Orquesta Sinfónica, Orquesta de la Municipalidad y Orquesta de Cámara de la Universidad, todo desarrollado en la ciudad de La Plata Luego de improvisar algunas noches con Alberto Favero, fue convocado por el Mono Cohen (Rocambole), quien lo llevó hasta la casona donde se encontraba viviendo la gente de La Cofradía de la Flor Solar. "Me dieron un violín eléctrico y lo conectaron al amplificador. Cuando sentí por primera vez bajo mi pie el pedal Wah Wah, comencé a entrar en otra dimensión y a los dos días le dije a mi mujer que me iba de la orquesta sinfónica." (Pinchevsky). Una de sus primeras oportunidades sobre las tablas se produjo cuando acompañó a La Cofradía de la Flor Solar en el primer B.A. Rock, donde deslumbró al público y a la crítica con su mágico instrumento. Con su nombre en ascenso, comenzó a formar parte de La Pesada del Rock y mientras tanto hizo sonar su violín en cuanta grabación se lo permitiesen. En 1973 registró su primer ál-bum como solista acompañado por la banda liderada por Billy Bond y luego de recorrer diversos festivales, partió hacia Europa a mediados de la década del '70. Tras realizar algunas presentaciones callejeras, se incorporó a Clean Light Symphony, grupo encargado de telonear a Gong en una extensa gira. Durante ese 1975, Gong sufrió el alejamiento de su guitarrista Steve Hillage y para reemplazarlo decidió convocar al violinista. Con ese grupo regresó a los estudios de grabación para registrar el disco "Shamai", en el que, además de interpretar su instrumento, intervino con un particular recitado en el tema "Cat in Clark's shoes". Después dé dos años de estar tocando en Europa con "Gong", las autoridades británicas lo deportaron a Francia, donde volvió a actuaciones callejeras. En diciembre de 1981 distintos medios nacionales se hicieron eco apresuradamente de una noticia llegada desde Europa: Jorge Pinchevsky había muerto.
Algunos años después se supo que la información no era correcta y, a mediados de 1985, regresó a nuestro país. "Es que estaba muerto (dijo Pin bromeando) y ahora resucité." Subió nuevamente a los escenarios en eventuales zapadas y en 1987 se fue a vivir a Mendoza, incorporándose fugazmente a las filas del grupo Alcohol Etílico. Los primeros años de la década del 90 regresó a Buenos Aires y comenzo a presentarse en lugares como Tabaco y El Samovar de Rasputín donde se pudo comprobar que su destreza con el instrumento estaba intacta. Y lo más importante, Pinchevsky conservaba intangible su espíritu libre. Desde su programa de radio en FM Sol y en sus presentaciones en público siguió diciendo las cosas fuertes y claras de siempre: "Vamos a crear nuevas formas de pensamiento. Estamos en los últimos años del milenio, entremos al 2.000 olvidando a los genios, a los gurúes. Olvidemos a los maestros. Hagamos un genio, un gurú, un maestro de cada uno de nosotros. Si no, simplemente me van a recordar como a un vulgar buen músico de un instrumento casi desconocido que se llama violín." En 1995 editó un nuevo disco, esta vez acompañado por La Samovar Big Band, integrada por diferentes músicos que solían compartir sus zapadas. El disco muestra a un Jorge Pinchevsky interesado por recobrar viejas canciones que abarcan desde el "Bolero" de Ravel hasta el "Adiós Nonino" de Piazzolla. Recupera además "Para ir a buscarte", una zamba de Ariel Petroccelli que solía cantar su amigo Miguel Abuelo. El disco fue presentado en sus habituales shows, según el para "Un auditorio joven, que aún no había germinado cuando él ya tenía raíces, hojas y flores."
Lamentablemente En junio de 2003 fue atropellado por un ciclista en pleno centro de La Plata, sufriendo un golpe en la cabeza que le provocó una lesión que no fue atendida a tiempo. Un día después del accidente, Pin, como le llamaban sus amigos, falleció a los 59 años.
Algunos años después se supo que la información no era correcta y, a mediados de 1985, regresó a nuestro país. "Es que estaba muerto (dijo Pin bromeando) y ahora resucité." Subió nuevamente a los escenarios en eventuales zapadas y en 1987 se fue a vivir a Mendoza, incorporándose fugazmente a las filas del grupo Alcohol Etílico. Los primeros años de la década del 90 regresó a Buenos Aires y comenzo a presentarse en lugares como Tabaco y El Samovar de Rasputín donde se pudo comprobar que su destreza con el instrumento estaba intacta. Y lo más importante, Pinchevsky conservaba intangible su espíritu libre. Desde su programa de radio en FM Sol y en sus presentaciones en público siguió diciendo las cosas fuertes y claras de siempre: "Vamos a crear nuevas formas de pensamiento. Estamos en los últimos años del milenio, entremos al 2.000 olvidando a los genios, a los gurúes. Olvidemos a los maestros. Hagamos un genio, un gurú, un maestro de cada uno de nosotros. Si no, simplemente me van a recordar como a un vulgar buen músico de un instrumento casi desconocido que se llama violín." En 1995 editó un nuevo disco, esta vez acompañado por La Samovar Big Band, integrada por diferentes músicos que solían compartir sus zapadas. El disco muestra a un Jorge Pinchevsky interesado por recobrar viejas canciones que abarcan desde el "Bolero" de Ravel hasta el "Adiós Nonino" de Piazzolla. Recupera además "Para ir a buscarte", una zamba de Ariel Petroccelli que solía cantar su amigo Miguel Abuelo. El disco fue presentado en sus habituales shows, según el para "Un auditorio joven, que aún no había germinado cuando él ya tenía raíces, hojas y flores."
Lamentablemente En junio de 2003 fue atropellado por un ciclista en pleno centro de La Plata, sufriendo un golpe en la cabeza que le provocó una lesión que no fue atendida a tiempo. Un día después del accidente, Pin, como le llamaban sus amigos, falleció a los 59 años.
"Este disco hay que escucharlo con una información previa: evidentemente no se trata de un álbum de composiciones del violinista Pinchevsky: de los siete temas incluidos en el álbum sólo tres le pertenecen y son en colaboración. El resto de los temas pertenecen a los integrantes de La Pesada, que acompañan al violinista, y son los verdaderos hacedores musicales de! álbum. De todos modos "el violin mágico" está y muy presente (por supuesto) en todos los temas. El trabajo de Pinchesky se hace destacado y entendible por primera vez. Y realmente uno se da cuenta que lo toca en serio. En otras oportunidades discográficas se limitaba a perseguir los riffs ahora es el instrumento líder y no porque sea su long play: ocurre que Pinchesky tiene música, a pesar de que muchos creen que de esa cosita electrificada sólo sale un ruido chirriante. Es importante también el trabajo de La Pesada, sobre todo el de Alejandro Medina y Claudio Gabis, este último con un excelente trabajo de guitarra muy blusera y calma, casi su sureña. También están los tradicionales juegos y ocurrencias contraculturales de la zapada. Algunos como la rumba tienen verdadera gracia y cumplen su cometido. Tapa: Realmente buena en la concepción y excelente montaje fotográfico. El mensaje del interior (una especia de libreto de teleteatro) es, como lo dice quien lo escribió (seguramente Jorge Alvarez) es un poco hermético. Síntesis: Jorge Pinchevsky tiene una gran personalidad musical y este álbum sirve fundamentalmente para ponerlo en claro, para darlo a conocer. Es realmente un álbum exótico, distinto, tanto como su intérprete principal, que es a la vez una especia de curioso extranjero, simpático y amable, en el pais del rock."
Revista Pelo - Reseña del álbum (1973)
"El disco empieza con una frase mía refiriéndome a Beethoven y en el momento en que la digo se liga con una historia que no había planeado. Medina se anota con el bajo, Gabis toca el piano. Kubero en la viola y empezamos a zapar. A ese tema le puse "La maravillosa Marta y la fuerza de las cosas", porque en ese momento vivía con una chica que se llamaba Marta y empezaba a experimentar la fuerza del amor. En el disco están un poco alterados los autores de los temas porque nosotros éramos una especie de cooperativa. Cuando a algún músico le faltaba cachet de derechos de autor para Sadaic, lo poníamos en algún tema". En "No nos alcanzarán las mariposas" canto yo. Es una cosa rarísima, porque me obligaron a cantar por la fuerza."Rock full track con semidesarrollo" se llama así porque no lo terminamos. Cuando lo grabamos, ocupamos todos los canales de la consola y los solos que teníamos planeado meter no entraron y quedó eso que está grabado."
Jorge Pinchevsky - Sobre la grabación del álbum
Músicos Que Participan:
Jorge Pinchevsky: Violín, voz
Alejandro Medina: Bajo, voz
Claudio Gabis: Guitarra
Kubero Díaz: Guitarra
Jorge Pinchevsky: Violín, voz
Alejandro Medina: Bajo, voz
Claudio Gabis: Guitarra
Kubero Díaz: Guitarra
(Y demás integrantes de La Pesada)
Temas:
01- La maravillosa Marta y la fuerza de las cosas
02- Parte de baile para grupos solistas
03- Pegado a la rumba
04- Juan Manuelito Rock
05- No nos alcanzaran las mariposas
06- Rock full-track con semidesarrollo
07- Y así van pasando los años, señora
Temas:
01- La maravillosa Marta y la fuerza de las cosas
02- Parte de baile para grupos solistas
03- Pegado a la rumba
04- Juan Manuelito Rock
05- No nos alcanzaran las mariposas
06- Rock full-track con semidesarrollo
07- Y así van pasando los años, señora
Formato: FLAC - 44.100 Hz / 16 Bits
pass: naveargenta.blogspot
Buena informacion amigo
ResponderEliminarSiempre trato de darle un contexto al disco publicado. Gracias por valorar el trabajo.
EliminarQue bien,un violin y con un buen cigarro o tabaco para dejarse llevar tocandolo es muy bueno
ResponderEliminarAl tabaco le agregaría una copa de buen vino tinto...Saludos!!
EliminarValla no sabia esto pero es bueno
ResponderEliminarQue lo disfrutes y gracias por pasar por la nave.
Eliminarrealmente este tipo es un geño un poco olvidado talvez pero bueno, acá estamos, en la nave del rock argento para darle vida y vijencia a los grandes del rock argento. y me gustaría si usted podría conseguir el disco jorge pinchevsky y la samovar de 1995. es inconseguible. gracias. rock is forever.
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